So real

El único blog destinado a plasmar los pensamientos de una neurótica de 25 años o más...

Tuesday, June 23, 2009

El retorno de Ginger


Después de meses y puede que hasta años sin aparecer, una se da cuenta que puede que no recuerde nada. Como Mulder cuando fue abducido en la 8ª temporada de X Files, la vida da muchas vueltas y no te dice que continua contigo o sin ti.

En un año la vida de una persona ha podido cambiar de manera drástrica:
1. Se independiza con su pareja.
2. Consigue trabajo más o menos estable.
3. Termina la carrera.
4. Se da cuenta de que se hace mayor.

Este último punto es muy importante, en la frontera de los 30 no te planteas la nueva década con la anterior. Es que ya eres MAYOR.
Mayor para salir con tus amigos, mayor para ir a conciertos, mayor para jugar con las Barbies, eres tan mayor que un día te miras al espejo y tu bonito pelo rojo va tornando a plateado, herencia o nervios también pueden ser los causantes de esto último.

Y una duda te corroe: ¿el tener pareja estable te condiciona en los últimos coletazos de tu juventud?
No te mientas, si eres feliz eres feliz, deja de ser la niña lánguida y misteriosa y asume tu papel de joven sobradamente preparada.

Añadimos un último punto: aunque la tecnología esta muy bien, los teclados táctiles no se han hecho para a los que nos sudan las manos.